domingo, 27 de enero de 2013

Nota a Magali Sánchez Alleno



El vaivén de la gente en direcciones opuestas distrae mi espera. Los espacios se llenan y mi ansiedad por el encuentro coordinado se acrecienta al aproximarse la hora del show. Las luces van cayendo y como en las obras de teatro el tiempo se detiene al salir la estrella principal. Se me viene a la mente el anciano crujir de la madera debajo de los asientos color borgoña de las viejas salas de Corrientes. De repente la escena parece iluminarse por miles de reflectores que se detienen en su figura. Su presencia atrapa la atención de la gente. La reconozco: es Magali. Me acerco a saludarla y como en las obras, su armoniosa voz da comienzo a la función… (Continua la nota en nuestro Diario -tanto en formato papel o en su versión digital) 



Aquellos recuerdos de la casa de José Mármol...


El  Teatro Colón... la primera revelación: "La maestra de música nos llevó al Colón (...) Yo entre y vi esa araña. Para mí era como increíble  No me olvido más. Todavía tengo ese recuerdo (...) Yo quería trabajar en el Colón..."


La segunda revelación: Chicago (el musical)


El Fantasma de la Opera, la  gran oportunidad


  "...yo  quería estar en el musical, para  mí "Bella y Bestia" era  una fiesta (...) Ni bien di la primera audición me dan el papel de Bella (...) Y valió la pena porque llegó el protagónico)


Fernando Candeias charla con Martín Ruiz sobre Magali Sánchez Alleno
para el Diario Cultura|Sur

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